domingo, 19 de diciembre de 2010




“La reforma de la educación secundaria: la experiencia de España”



*Álvaro Marchesi

“Cualquier reforma se inicia con la intención de mejorar, como es este caso la educación. Para ello se plantean una serie de objetivos educativos que son los que inspiran todo el proceso. Sin embargo, sean cuales sean éstos, inevitablemente se entremezclan con opciones políticas determinadas y con diferentes demandas sociales, pudiendo variar ambas a lo largo del tiempo. Igualmente, aparecen problemas presupuestarios relacionados con la propia gestión y dificultades que responden las lógicas resistencias al cambio que se producen siempre ante procesos similares.”


Ya sea en España o en México, podemos ver como el problema es el mismo o tiene cierto parecido ya que en ambos países hay trabas y situaciones ajenas a los docentes que impiden un ejercicio libre y más significativo de la enseñanza por los múltiples obstáculos que el mismo sistema nos pone al ser tan burocrático y no dar apertura a que también los docentes puedan participar dentro del diseño de los programas porque son ellos quienes conocen realmente las necesidades educativas dentro de sus aulas, pero dicha situación no puede darse por los tantos compromisos que existen entre los diferentes niveles de gobierno y los sindicatos, anteponiéndolos a la realidad que enfrenta la educación, porque para nuestros gobernantes (dígase en España o en México) lo más importante es quedar bien, cumplir y pagar los favores que te hizo tal o cual funcionario y después velar por los verdaderos intereses del pueblo (sobretodo de la juventud que es el motor de la sociedad).

Es por eso que debemos tener las ganas y el compromiso de cambiar las cosas y no nadamás debatir lo que nuestras autoridades nos presentan, sino velar por la educación y el verdadero aprendizaje de nuestros alumnos por nuestra cuenta, determinar sus verdaderas necesidades educativas y tratar de combatirlas con los recursos que tenemos haciéndolos significativos para ellos, así sea solamente un mapa, un simple lápiz o el mismo programa de la red edusat en nuestro caso.
Por. Bárbara Rebeca Silverio Freer

5 comentarios:

  1. En mi opinión si una reforma esta para mejorar la calidad educativa, pues hay que empezar por capacitar a los trabajadores que nos la brindan, ya que es ahí donde están las partes "flojas" del sistema, bueno es lo que pienso, porque sabemos que aunque falten recursos, mobiliario e infraestructuras adecuadas, si afectan al desempeño de los niños, pero si el docente logra motivarlos esto no es impedimento para que logren los objetivos que en la reforma se establecen, lo importante es que se conozca lo que en la reforma se marca, ya que sino se practica como dice entonces de que sirve, por otro lado si son cosas que en otros países ha funcionado es por algo, México debería empezar por las capacitaciones antes de aplicarla ya que sino pasara lo que esta pasando, una gran incongruencia con lo que se pide y lo que se hace.
    Por: NUBIA IVONNE PÉREZ ARELLANO :)

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  2. Y así se dice que no nos importa (porque si se enuncia que no nos preguntamos es porque no nos importa) cuál es el sentido real de la escuela secundaria, si de verdad no se considerara la relevancia de la misma no podríamos efectuar juicos respecto de las problemáticas que la misma enfrenta, de la necesidad de efectuar reformas que den respuesta certera y oportuna a las condiciones cambiantes de las sociedades.

    Como atinadamente comenta mi compañera en su entrada la problemática es similar en muchos países del mundo y la culpa no considero que sea de los gobernantes, sino de auéllos que los eligen propiciándose así lo que dice un refrán "te quejas pero te dejas" no logramos impulsar proyectos productivos que respondan oportuna y cavalmente a las exigencias sociales respecto de educación.

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  3. Referirse a una reforma educativa, es pensar en una utopía que muy pocas veces puede alcanzarse, principalmente al iniciarse ésta, aunque claro no es un imposible. Es ahí donde entran en juego no sólo las estrategias de las autoridades educativas o políticas, sino las habilidades docentes como se puntualiza en la publicación, pues cada profesor tiene la tarea de realizar el cambio que le corresponde desde su aula, en su quehacer en la escuela y sobre todo en su labor social, porque es el impacto social quien impulsará más rápidamente un verdadero cambio en lo educacional.
    Pero ¿cómo una reforma puede pasar de utopía a realidad? Siguiendo un proceso en el cual predomine la congruencia, pues si se pide calidad educativa como resultado de la educación básica, entonces se debe tener necesariamente calidad en las personas encargadas de impartir dicha educación. Sólo de esa manera una reforma educativa podrá irse adaptando para lograr los resultados que se pretenden.

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  4. Sabemos que el contexto siempre tendrá una influencia mayor a la que se cree es por eso que uno como docente deberá de sacar ventaja a esto lograr obtener la manera de mejorar en los ámbitos exactos para poder guiar con buenos pasos a los alumnos que se encuentran en nuestras manos.
    Dentro de la lectura también se puede ver el hecho de mejorar la calidad en la educación ya que siempre se habla o se llega a criticar el impacto que se tiene cuando no hay calidad pero no pensamos en el granito de arena que podemos aportar por mas mínimo que nosotros lo consideremos debe de verse la reforma educativa desde una perspectiva que propiciara cambios productivos no como otro modelo mas que puede quedar arraigado.

    Por: Nallely Ávila García

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  5. Al hablar de reformas educativas se me viene a la mente un nuevo desajuste para la educación, porque digo esto, lo digo porque nos cuesta mucho trabajo adoptar nuevas corrientes o formas de trabajo todo por no querer hacer un esfuerzo mayor al que estamos acostumbrados, nos gusta vivir dentro de lo monotonía, y tenemos una actitud renuente al cambio.

    Pero también hablar de algunas reformas como lo menciona mi compañera belem, es hablar de una utopía, ya que lo que se quiere alcanzar está fuera de nuestras manos, pero muchas veces sucede esto por el poco apoyo que se le brinda a la educación, sabiendo que la misma permitirá un progreso para la sociedad. Además se espera que estos cambios sucedan al instante, y como no lo hacen así se desecha la idea de inmediato.

    Por: José Mateo Rodríguez Alvarez

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